lunes, 16 de marzo de 2015

·LP, de Acantilados·

¡Primera reseña del blog! Espero que haya muchas más. Espero darle un poco más de bola al blog porque en seis años llevamos cuatro entradas, siendo ésta la quinta.

Llegó mi hermana a la ciudad y con ella vino el CD que le pedí que me comprara en Buenos Aires: el LP de Acantilados. Lo recibí, analicé su empaquetado: muy linda tapa, con ese diseño extraño que semejará olas y una flor, supongo. Es silencioso: no hay ninguna letra, ninguna palabra. La tapa es calma, la tormenta se desata adentro.

Antes de reproducirlo tuve que limpiar un poco el equipo de música. Después agarré el disco, sublime, y comenzó la fiesta.

Cuando sonó el primer tema, mi primer pensamiento fue “ah, es bueno, se parece a…” Pero no, Acantilados no se parece a nadie. Alivio me generó saber eso: es una banda auténtica, original. Algo muy bueno en un género en el que a veces abundan las bandas que imitan a Explosions in the Sky.

El primer tema es magnífico, es un perfecto preludio a lo que hay después. La línea de bajo es hermosa alrededor del minuto 4. El segundo tema comienza con una batería que te pone expectante, y para bien. Se desarrolla como un suave susurro contado al oído, hablando de alguna historia secreta que se desarrolla en algún bosque, hasta que de pronto el susurro desaparece y te convertís en el protagonista… O algo así. Lo que quiero decir es que es un tema hermoso que hace volar a la imaginación. No tengo experiencia en ésto.

 Después de la intensidad del tercer tema, llega el cuarto que, a pesar de sus más de once minutos, es llevadero y entretenido. Los dos primeros minutos son muy muy buenos, pero a partir del minuto dos, me encanta, se pone fantástico. ¿Será éste el “plato fuerte” del disco, o sólo lo pienso porque es el que más me gustó a mí, junto con el sexto?
Y llegamos al último tema, luego de pasar por una quinta pieza que es muy linda e interesante pero de la cual no se me ocurre qué decir. Todos los temas son lindos. Ahora estamos en el sexto. A partir de los tres minutos, madre mía. Una bestia, una esfinge.  Hermoso en su totalidad: el epílogo, el final perfecto. Te dice adiós de una manera genial, apoteósica.

 El tracklist me parece que está bien organizado, es, digamos, equilibrado. Sabrán ustedes, lectores, si estoy diciendo boludeces o no. En resumen, es un lindo disco, interesante sobre todo, para destacar. No aburre en ningún momento. Para recomendar sin lugar a dudas a cualquier fanático de post rock que nos crucemos por la vida. Y, por qué no, a cualquiera que tenga ganas de escuchar nueva música. La guitarra es clara, el bajo es fenomenal, la batería es precisa. Todos los sonidos son protagonistas, se podría decir. Se podría decir que es un CD perfecto para escuchar solo, con los ojos cerrados, dejando volar la imaginación. Se podrían decir muchas más cosas para recomendarlo, pero lo mejor es escucharlo y dejar que hable por sí mismo.

Link al Bandcamp de Acantilados: http://acantilados.bandcamp.com/album/lp

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domingo, 6 de enero de 2013

·Bahía Blanca·














... sí, algo así dijeron que era el mundo.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

·(sin título)·

Nadie a quien pedir,
nadie a quien temer,
nadie a quien acudir,
nadie a quien ver,
nadie que te pida,
nadie que te dé,
nadie que te obligue
a contar algo que no fue,
nadie que te use,
ni que te patee,
nadie que te siga,
ni que se ponga a tus pies,
nadie que te odie,
ni que te obligue a querer,
nadie que te olvide,
y nadie que no esté bien,
nadie que te robe,
o que te quite lo que no tenés,
pero fundamentalmente,
nadie que te diga cómo aprender a leer.

lunes, 21 de junio de 2010

·Iríase·

De repente abre el cajón y observa sus recuerdos. Están cerca, pero no los conoce. Ha olvidado cada buen momento de su vida que había prometido recordar eternamente. Se ha mentido, se ha traicionado. Se ha borrado.Como si nada, mira hacia atrás. Ve el horizonte. Allí está todo. Sueños, recuerdos, gustos. Nunca los va a alcanzar, nunca se alcanza el horizonte. Se decide a escuchar la música que le gustaba antes. La escucha y recuerda el amanecer.
Y se dió cuenta de que su vida ya había pasado.

martes, 8 de diciembre de 2009

·Prosa·

Son los recuerdos algo hermoso. Tengo ganas de escribir pero no se qué. Hay veces que simplemente no salen las rimas. Qué momento odioso este, que me hace reflexionar y dar vuelta la cabeza, buscando ideas, aclarando la inspiración. no, no hay rimas. Sólo hay fechas. Miro el reloj, y ya es tarde. Me llegan varios mails de la misma persona. Qué lindo momento este, extrañando a alguien cuyo nombre no conozco, con ganas de preguntarle quién es. Qué bello momento este, la paz hace que no salga nada. Sólo hay ideas, pero ¿qué es una idea cuando no se puede materializar? Ya se terminó el CD de Led Zeppelin, qué hermosa banda. Hoy simplemente no hay rimas, no es el día.
A eso lo llamamos prosa.